Chalazión

Cuando el médico dijo esta palabra extraña creí que se la había sacado de una lista de barbarismos, o que era propia del caló médico, en este caso de los oftalmólogos. Pero no, la busqué en el diccionario y la encontré. Primera sorpresa.

La segunda sorpresa es que se trata de una palabra de género masculino. Es decir, que debemos referirnos a ella como el chalazión, un chalazión. No sé si esto era exactamente lo que me ocurrió, pues el diccionario menciona que se trata de una obstrucción de una glándula en el párpado, lo que provoca un abultamiento que no debería tener una duración prolongada.

Al tercer día del problema tenía el ojo izquierdo entrecerrado. El párpado estaba hinchado y me dolía bastante. Hasta entonces fui al oftalmólogo. En la carta que escribió para que me excusara del trabajo por dos días dijo que yo padecía de un Absceso Palpebral. Dicho en cristiano: tenía una acumulación de pus en el lado interno del párpado.

Luego del drenaje (que dolió bastante) sentí un gran alivio. Desde entonces estoy con gotas y pomadas hasta que cumpla una semana de tratamiento. Ya mi párpado luce casi normal. Pasé varios días sin poder acercarme a una computadora o un libro. Todavía recuerdo que, una vez que el médico terminó el tratamiento, el dolor en la zona cedió casi de inmediato.

Prometo que no voy a tardarme tanto para ver al médico si alguna vez vuelve a ocurrirme lo mismo. Sucede que hace muchos años me salió un pequeño quiste en el párpado derecho (en la Tierra de collares le llamamos "pispelo"), que aún tengo, y pensé que me estaba sucediendo lo mismo en el otro para emparejarme.