27.1.09

A ver, a ver

Hoy me enviaron un correo electrónico en el que leí un artículo de Eliseo Alberto titulado No pronuncies mi nombre, publicado en Milenio. Los que conocen la poesía de Roque Dalton adivinarán sin haberlo leído que se trata de un panegírico dedicado a este escritor.

Al leer el primer párrafo hubo algo que me causó extrañeza. Comparto con ustedes un fragmento:

Nadie sabe a ciencia cierta qué cara nueva le montaron sobre su cara de siempre –cara de pájaro, afilada, con nariz de hacha y quijada de cachiporra. Supongo que le calaron conchas de calvicie en el cabello hasta lograr una frente amplia, incluso arrugada. Esos retoques suelen conseguir el espejismo de un cráneo diferente, de una calavera más propicia para un señor hecho y derecho.

De lo que habla este párrafo es de un episodio conocido: antes de regresar de manera clandestina a la Tierra de collares, Dalton se sometió a varias cirugías plásticas con el fin de ocultar su identidad. Obtuvo documentos bajo el seudónimo de Julio Dreyfus Marín, y así entró sin ser detectado por los servicios de seguridad.

Pero el artículo de Eliseo Alberto plantea que -aparentemente, al menos así lo entendí- nadie salvo un grupo reducido de personas supo cuál era la apariencia de Dalton luego de las cirugías. Recuerdo que por ahí anda una foto de Roque con lentes y cabello revuelto, y se supone que es la que utilizó en los documentos de su nueva identidad. ¿Alguien tiene más información al respecto?

Toi confundido.

4 comentarios:

Rafael Menjivar Ochoa dijo...

Lo que sé es que no podía parecerse al busto que hicieron de él en la UES. Lo hubieran agarrado de inmediato, por feo y por imposible. Ni Michael Jackson...

Unknown dijo...

¿No será que ese busto es del Mariscal Ney?

militodias360 dijo...

hay fotos de dalton pequeño y cuando salio del esternado, busca en internet.

Unknown dijo...

Ya conozco esas fotos. Tengo muchas de ellas también en libros. A la que me refiero es una en la que Dalton aparece con lentes y bastante cabello. Se supone que ésa es la foto de la identidad que utilizó para entrar al país. Pero Eliseo Alberto dijo en su columna que la nueva imagen de Roque quedó en el misterio.