Vitus

Una película en la que interviene el gran actor Bruno Ganz siempre me llama la atención. Por eso fue que me interesé por Vitus, de la que no tenía noticias previas. Si no me equivoco, es la primera película suiza que veo.

Vitus es un niño prodigio. Es muy inteligente y un buen pianista. Su padre es un hábil ingeniero y cuando obtiene una promoción en su trabajo la vida de la familia cambia por completo. El abuelo -Bruno Ganz- representa los valores tradicionales y el calor de hogar que Vitus extraña a medida que el éxito económico continúa.

Al cumplir doce años Vitus se siente muy solo. Sus padres viven en un mundo materialista. Una noche tiene un accidente y se golpea la cabeza. Sus padres descubren que esto ha afectado su intelecto. En lugar de ser un genio se vuelve un niño normal. Pero esto lleva a que su vida se vuelva tranquila, libre de las presiones anteriores.

Vitus es interpretado por el joven prodigio Teo Gheorghiu. Aunque no es un actor profesional, desempeña su papel con dignidad y soltura. Pero es frente al piano que observamos sus verdaderas dotes. Varias de las interpretaciones musicales que escuchamos en la banda sonora lo atestiguan.

Situada entre el drama y la comedia, esta película es una muestra de que el cine europeo puede tener contenido y al mismo tiempo ser entretenido. Hay una buena química entre Ganz y Gheorghiu, lo que al final deja un buen sabor de boca para los amantes del cine.