16.8.07

El cielo protector


Durante muchos años, Paul Bowles ha sido un autor de culto en la literatura estadounidense. Su retiro en la ciudad de Tánger lo volvió un escritor exótico. Una larga legión de seguidores viajó hasta esa ciudad sólo para observar los sitios por los que él caminaba. Con suerte coincidían con él, al igual que le ocurrió al escritor guatemalteco Rodrigo Rey Rosa.

El cielo protector es, quizá, el libro más conocido de Bowles. El triángulo formado por Kit, Port y Tunner es el motor de la historia. El matrimonio formado por Kit y Port decide viajar al norte de África luego de finalizada la segunda guerra mundial. Port invita a su amigo Tunner, pero en el transcurso del viaje se arrepiente de ello. Cuando tiene una oportunidad logra que tome otro camino para estar a solas con Kit.

Justo en el momento en que Port logra acercarse más a Kit, aquél cae víctima de la tifoidea. El viaje de placer se convierte entonces en una odisea, tanto para el enfermo como para la esposa, quien pasa momentos difíciles para enfrentarse a tan grave problema.

Me llamó la atención el papel que juega el desierto en este libro. En los cuentos de Bowles, el desierto es uno más de los personajes. La belleza que el autor encuentra en este sitio inhóspito es transmitida a sus narraciones cortas. En esta novela, por el contrario, los protagonistas y sus conflictos son los que ocupan casi toda la visión del lector. Port ama el desierto, y le agradaría vivir siempre ahí. Sin embargo, no veo este lazo tan claro como sí lo hice cuando leí los cuentos de Bowles.

¿Que si me quedo con los cuentos o con esta novela? No, en esta ocasión no puedo tomar bandos. Todo lo que he leído de Bowles me ha gustado. Por mí, su reputación ha sido forjada con mucho merecimiento.

No hay comentarios: