23.7.07

Paradiso


Éste es uno de los libros de más difícil lectura que he encontrado. El ejemplar que tengo, que conseguí hace algunos años, me estuvo esperando desde entonces. Es un bello ejemplar de una colección del Fondo de cultura económica.

José Lezama Lima es uno de los escritores paradigmáticos de la literatura cubana. Paradiso es una novela de estilo barroco, en la que el autor nos enfrenta con un cúmulo impresionante de conocimientos. Es éste su trabajo más conocido, y tal vez el más estudiado.

Los esquemas simplistas que quieren definir a toda costa un argumento se quedan cortos. Nada avanzaríamos si se menciona que es la historia de tres generaciones familiares. José Cemí, el personaje que aparece en la mayoría de capítulos de la historia, es en quien se resumen los diversos episodios de sus antecesores, los que vieron el nacimiento de Cuba, sus primeros años de vida bajo el protectorado de los Estados Unidos, y la época de la dictadura de Machado.

"-Es muy justo tu Fronesis, por Quinto Curcio, el biógrafo de Alejandro Magno, tan leído por Luis XIV y por Napoleón. Esa impresión también me la causa a mí. Sólo que tu juicio brota del intelligere, y el mío de las profundidades del infierno. La amistad de Fronesis para ti es fortalecedora, como se deriva del retrato que acabas de hacer, es robusta y clásica. Pero Fronesis es para mí -hizo una pausa y miró a Cemí con tristeza-, claro que sin saberlo, yo diría que hasta queriéndolo evitar, mi demonio, mi oscurecedor, mi enemigo inconsciente, el que me destruye. Soy un hígado etrusco, donde los hechiceros hacían adivinaciones, destruido no por un buitre, sino por un faisán que se mueve en una tapicería, donde cada hilo está elaborado por devanadoras que han jurado mi destrucción".

El párrafo anterior es parte de una conversación entre Foción y Cemí. Hablan de Fronesis, un amigo en común. A medida que la novela se acerca a su fin, los diálogos de los personajes se vuelven más difíciles, cargados de referencias culturales. Al principio del libro, por el contrario, la narración es más fluida, como si estuviera alineada a una época más sencilla. Pero cuando los personajes se empapan de la cultura del mundo, Lezama Lima vuelca en ellos sus diversos conocimientos y puntos de vista.

A una pregunta sobre la técnica novelística, Lezama Lima responde con unas palabras que resultan esclarecedoras para comprender su materia narrativa: "Yo soy renuente a usar en literatura expresiones como técnica o estructura, me parecen palabras comentadas. De las técnicas se derivan leyes. Por el contrario, un configurador de la expresión, un pintor, un escritor, tienen experiencia de taller, la balanza secreta para la gravitación de cada palabra o de cada color. Si mi novela ha podido desenvolverse ha sido por el desprecio de todas las técnicas, de los clichés para construir novelas. Yo no tengo una técnica, yo no recomiendo modos ni maneras, yo no tengo ningún parti-pris al enfrentarme con la palabra. Tengo la alegría de ver las palabras como peces dentro de la cascada".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Salvador,
Veo que me he perdido de unos buenos blogs tuyos y otros buenos comentarios. Me he puesto al dia en algunos pero no encuentro el cuento que me dijiste. Porfa mandame el link.
Saludos