El periódico electrónico El faro, en su edición de esta semana, publicó un artículo sobre las declaraciones que hace algunos días el ex capitán Álvaro Saravia concedió a El Nuevo Herald. Saravia aceptó su participación en el asesinato del arzobispo de San Salvador Monseñor Óscar Arnulfo Romero, el 24 de marzo de 1980.
El artículo incluye algunas declaraciones del presidente Antonio Saca, quien espera que la prometida confesión de Saravia sirva "para cerrar heridas". En nuestro país se decretó una ley de amnistía que perdonó los crímenes ocurridos durante la guerra civil de 1981-1992.
Cuando revisé el artículo de El Nuevo Herald me llevé una gran sorpresa. Hay una durísima acusación contra el actual partido en el gobierno. El siguiente párrafo habla del año 1987, cuando Saravia fue capturado en Estados Unidos y diversos sectores nacionales pidieron su extradición:
ARENA abrió dos frentes para evitar la extradición de Saravia y garantizar su silencio. Contrató al costoso abogado de Miami, Neal Sonnett, y presionó a la Corte Suprema de El Salvador para que no aprobara la solicitud de extradición. Como resultado del éxito en ambos frentes, Saravia fue liberado 15 meses después de su arresto.
Hay muchas personas que opinan que Saravia sólo quiere sacar provecho de la inestabilidad que generarían sus declaraciones. Ojalá que no sea así, y que en realidad esté arrepentido de su participación en el magnicidio.
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4 comentarios:
Yo no vivi la guerra como tal, aunque permaneci en el pais durante toda su duraciòn, estaba muy pequeño, y sinceramente en Santa Tecla, no recuerdo que haya pasado nada grave. Creo, sin embargo, que eso de la amnistia, y de no abrir heridas del pasado (un eufemismo de relegar al olvido los episodios duros de nuestra historia) no es lo mas cuerdo. Este señor Saravia deberia de dejar de estar amenazando con que va a hablar y simple y sencillamente hablar. Nadie coherente en E.S se va a escandalizar de escuchar lo que la vox populi sabe casi desde el dia siguiente del asesinato de monseñor. Todos debemos de aceptar la responsabilidad de nuestros actos. Y mucha gente que estuvo involucrada en ese asesinato, tanto por autoria intelectual, financiando, no impidiendolo, etc. deberian de aceptarlo. Pero claro, todo sera usado de la peor manera posible, habra quienes se llenen la boca y utilizaran la figura de Monseñor, para sus propios fines partidarios. Eso es de esperarlo.
Dr. Kabuto: lo más triste es que, como vos decís, cada quien jala agua para su molino. La figura de Monseñor es utilizada para distintos fines. Eso es lo que ha bloqueado el proceso que se lleva hoy en el Vaticano para su beatificación.
Ultimamente estan lanzando ya cortinas de humo como pudiste leer un domingo de estos en el que aparece un artículo vinculando a un posible sicario Argentino y la participación de los Generales de aquella oprobiosa epoca Argentina en la maquinación del crimen.
Sobre todo porque Saravia ha dicho que sacará a luz quienes realmente fueron los autores intelectuales del crimen y eso involucrará a respetables y honorables personas de la política y sector empresarial actual.
Hunnapuh: esperemos a las declaraciones de Saravia, si es que alguna vez son publicadas. Esto de la conexión argentina pudo ocurrir, pero implicaría una participación directa del ejército nacional, ¿no lo creés?
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