9.6.06

El fútbol entre amigos

Agustín Delgado, atacante de Ecuador, prolongó de cabeza un saque de banda de un compañero. El pase lo recibió Carlos Tenorio, quien se adelantó a un defensor polaco y cabeceó al palo derecho del portero. Éste no pudo hacer nada para evitar el primer gol suramericano. Su postura en la foto muestra el gran esfuerzo que hizo. Pero fue en vano, la pelota fue a descansar a las redes.

Así es, por fin ha comenzado el Campeonato Mundial de Fútbol. Y los miles de millones de aficionados estaremos pendientes de los resultados. Por mi parte, me prepararé para un fin de semana lleno de partidos emocionantes. Los dos de ahora dejaron una buena cantidad de goles.

Hace algunos años conocí a un psicólogo italiano, muy buen amigo, izquierdista, y además aficionado del AC Roma. Él me dijo que mucha gente que comparte su ideología política ve el fútbol como el opio de los pueblos, o en el peor de los casos, como un negocio que sólo favorece a unos pocos. Este amigo comprende que el fútbol es un fenómeno antropológico, pero también una pasión indescriptible que vale la pena disfrutar.

Yo no comparto esa idea de muchos que ven el fútbol como una actividad embrutecedora. Al contrario, la veo como un deporte capaz de unir a personas de muy diferentes ideologías, credos y estratos sociales. Veintidós jugadores se reúnen en torno a una pelota, y muchos vemos poesía en un gol logrado con esfuerzo. O también podemos decir que un partido fue magnífico a pesar de que no se abriera el marcador.

A todos aquellos que detestan el fútbol quiero pedirles que nos dejen volvernos niños durante un mes. Permítannos olvidarnos por un momento de las amenazas de guerra global, terrorismo, conflictos religiosos, fricciones fronterizas, depresiones económicas y escándalos políticos. Durante treinta días nos volveremos locos por una pelota que busca de manera aflictiva entrar a una portería. Ya tendremos todo el tiempo del mundo para volver a nuestra condición de simples humanos.

7 comentarios:

xxx dijo...

Estoy tan contenta que Ecuador ha tenido 2 ayer noche. Solo me gusta los equipos latinos.

Unknown dijo...

Saadna: leí la nota en tu blog. Recuerda que Brasil y Argentina no sólo son buenos en fútbol. Brasil es el campeón mundial de volley ball de sala y de playa. Argentina es el campeón olímpico y subcampeón mundial de baloncesto.

México tiene muy buenos marchistas y mediofondistas. Ecuador tiene a uno de los mejores marchistas del mundo. Colombia tiene muy buenos ciclistas, patinadores y levantadores de pesas. Y ni hablemos de los cubanos...

Rafael Menjivar Ochoa dijo...

Vi el de Alemania contra Costa Rica y parte del de Ecuador contra Polonia. En el primero me pareció que los alemanes están guardando el decibelaje para después. Mantuvieron el control, una distancia sana en puntaje y no desmadraron a los visitantes; después de todo son los anfitriones. Y me da la impresión de que los dos goles no fueron de la selección tica, sino de Wanchope, que es muy bueno. Del otro partido... híjole... Qué chido que ganó Ecuador. No me pareció un partido demasiado interesante.
A ver qué pasa con Argentina y México, que juega el domingo. Este último va a ser interesante; en 1986 hubo un partido entre México e Irán que quedó 1-1, creo, y los mexicanos son bien resentidos. Igual Lavolpe se ha puesto bien misterioso porque la selección juega mal, pero creo que no puede darse el lujo de hacer un partido de rutina.
Y, en efecto, nunca veo fútbol, excepto en los mundiales. Unos cuantos partidos cada cuatro años son suficientes para mí.

Anónimo dijo...

A poco del encuentro Inglaterra-Paraguay, todavía lamento la lesión que dejó a Cardozo fuera del torneo.
En cuanto a "favoritos", no los tengo. Me abruma una tonta idea cada vez que hay un Mundial. El '98, por ejemplo, me gustó Croacia; el '94 Nigeria; el '02, Turquía. Favorito, perenne simpatía o "hinchaje" sólo tengo en el Perú por la camiseta más bella del mundo, la "crema" (disculpe esta parcialidad perulera; luego, aprecio muchísimo los colores del Barcelona y de Boca).
En los mundiales le voy siempre a las "sorpresas", a lo que no se espera. Porque alguna vez un pequeño habrá de coronarse; un 'chico' sin tradición ni títulos de alcurnia.
Por eso aguardo aún un campeonato mexicano, uno holandes, uno peruano...por qué no...
Para la final del '98 celebré como loco el título francés y tarareé emocionado La Marsellesa. Desde ese día no espero más nada de Francia.

Anónimo dijo...

Muy buenos los partidos del fin de semana. Salvador, ¡claro que tenemos derecho a pasar un mes fascinados por la pelotita! bueno tengo que confesarles que aunque mis dos esquipos favoritos son dos de los grandes, tengo escondido en el corazón mi preferencia por los más débiles (sentimentalismos, jeje)

Unknown dijo...

Rafael: fue muy conmovedor cuando los jugadores mexicanos abrazaron a Oswaldo Sánchez al final del partido. El portero había perdido a su padre unos cuantos días antes.

Antínoo: uno de los equipos "chicos" que podría ganar hoy es la República Checa. A ver si Holanda o España se ponen también las pilas.

Antares: hoy leí unas entrevistas con jugadores húngaros que participaron en el nefasto 10-1. Fueron muy respetuosos, y comentaron con profesionalismo por qué se dio ese marcador. Se me hizo chiquito el corazón con la historia. Eso sí que fue muy sentimental.

Aldebarán dijo...

Yo no pienso que el futbol sea el opio de los pueblos. Lo que si creo es que en la Tierra de Collares forma parte del binomio "pan y circo" del cual sólo nos viene quedando el último.

En fin, disfruta el Mundial.